Índice
– Audio
– Transcripción (texto y pdf)
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Audio
En este audio (cuya transcripción coloco abajo, en forma de texto completo)…
Enlaces al audio:
– versión mejorada tras el primer audio más improvisado, que sustituí en ivoox por esta otra versión:
– versión anterior, más improvisada:
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… En este audio vemos excepcionalmente una noticia sobre el aborto, que he visto «de casualidad».
Un medio oficial de comunicación transmitía una frase de una célebre política española, que nos invita a razonar equívocamente:
«Ayuso defiende que abortar sea la decisión de la menor: ‘no puedes obligar a nadie a llevar la vida que no ha deseado'».
En el audio (y el texto) vemos un poco sobre los errores «de lógica» que hay ahí (es decir, lo que se quiere que pensemos, que deduzcamos… pues ese enunciado es un acto de control social, de «ingeniería social» – como casi siempre -).
Transcripción
Este texto es la transcripción de dicho audio mejorado (con arreglos y añadidos breves respecto a la primera versión). Se titula:
“Errores lógicos sobre el aborto, transmitidos por los guapos políticos de diseño, y que «condenan» esta civilización”
– Formato pdf: pdf
(licencia del texto: Creative Commons: CC BY-NC-ND 3.0 ES; Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 España)
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Transcripción:
Muy brevemente, con el tema del aborto que estamos viendo… Hoy he visto una noticia de casualidad – porque no suelo ver noticias -. Era la televisión de un bar, al pasar delante, donde había un letrero en la tele y estaban hablando del aborto. Era una frase de una política célebre de aquí, de Madrid, llamada Ayuso; le cae muy bien a mucha gente; ella es como “un producto” que han intentado vender muy bien… y en la noticia dice que:
“abortar es la decisión de la menor”
diciendo también lo siguiente:
“no puedes obligar a nadie a llevar la vida que no ha deseado”.
O sea, fijémonos en el error de lógica; pues “llevar la vida que ha deseado” implica decir que la menor tiene que responsabilizarse del niño, y se podría organizar para que no fuera así.
Es decir, si es verdad lo que estamos viendo – algo que, como digo, yo lo estoy comprobando cada vez más y que es un experimento que cada uno tiene que hacer con su alma, por así decir -… si es verdad lo que estamos viendo… resulta que sería mejor que la menor no mate, pues estamos viendo que eso compensa negativamente en el alma; es decir, es una cosa que desarmoniza más todavía el alma.
De hecho, el deseo de matar no vino puesto en el alma de la persona, de nadie; y estamos comprobando que la encarnación es en el momento de la concepción.
Por lo tanto, cuando matamos un alma le privamos de la vida física y es un atentado contra su libre albedrío – por mucho que la tierra esté hecha un desastre y parezca que “no merece la pena encarnar” -… le privamos de esta vida que es como un primer paso en un crecimiento potencialmente eterno, un crecimiento en autoconsciencia, en amor… ejerciendo el libre albedrío – que es un don del alma -.
Por eso, cuando “matamos un alma”, sucede que nuestra propia alma va a tener un daño dentro, y que ya es un daño relativo a “relaciones de arrepentimiento”, ya no sólo de perdón.
Y esto enseguida lo vamos acumulando por el hecho de no soltar las heridas acumuladas, al no soltar todo lo que hemos almacenado – que son las “relaciones de perdón”, es decir, todas esas emociones que han entrado desde fuera de nuestra alma y que nos han invitado a bloquear emociones (los adultos del entorno, en la infancia) – por todo lo que hemos visto… aunque este es otro tema -.
Pero, fijaos, dice: “no podemos obligar a nadie a llevar la vida que no ha deseado”, y eso implica el control, como veis (y lo vamos a ver)… pues se trata de una “afirmación de control” – aparte de que es “neutra” -.
Ahora veremos por qué es “de control”… pero es que los políticos en general tienden a ser como “neutrales”, como si fueran presentadores de televisión; pero ellos tienen de neutrales lo que yo tengo de elefante rosa, porque en realidad le están haciendo el juego a “x” cosas – a un juego de control -.
Pero van de neutrales ¿en qué sentido? Pues porque en realidad están sirviendo lo que las encuestas les digan que son las opiniones más masivas, y las que por lo tanto les pueden dar en un momento dado votos por aquí, o una buena imagen por allá… y así.
Entonces es un tema de control, es decir “nosotros vamos a controlar vuestras vidas”, es decir, no queremos en principio que os auto-organicéis, por ejemplo – lo cual podría ser un escenario posible -: “no os auto-organicéis para que las menores puedan dar ese niño muy fácilmente en adopción, o puedan…” (y ello una vez que es constatado que es “malo” matar, ya que a todas luces es evidentemente malo, “sienta mal”… y para sentir eso sólo hace falta que comprobemos, cada cual en su alma, si es cierto o no que el alma encarna en la concepción; pero a todas luces todo el mundo sabe que “es malo matar”, y si somos realmente un alma, y si por lo tanto “matas un alma” – y da igual que tenga un mes de edad o una semana en el útero – entonces sucede algo, algo igual a lo que pasa cuando matas a un adulto: hay cosas que se se te remueven, y vamos, aunque sólo sea por egoísmo… dices: “aquí, con esto, no estoy cómodo, tengo que…”.
Entonces, de hecho, eso es lo que pasa con las mujeres: salen realmente traumatizados de las clínicas. Hoy he estado en la puerta de una otra vez – ayer no estuve -, pero salen incluso enfadadas. Yo tengo unos carteles puestos a unos metros de mí, en la otra acera donde está la clínica – que es una calle -, y una chica los ha arrancado con rabia. Yo los suelo arrancar cuando me voy, y ya me iba casi… pero lo dicho, que los arrancó con rabia.
Entonces, puede haber muchos casos, historias… pero en vez de ayudar a la gente, incluso a las malformaciones… a que no los tengan que matar (y hay recursos de sobra en el planeta), en vez de eso, y mientras tanto… lo que los políticos hacen es fomentar la venta de coches, por ejemplo (ahora eléctricos…).
Y mientras, por el otro lado… fijaos en lo que pasa: por eso es “de control”, y por eso son peleles, que son entre comillas “neutrales”… porque no son neutrales, pues en realidad sirven a los intereses que parecen estar cada vez mejor organizados (lo hemos visto en audios anteriores), pues consiguen que se cohesionen los poderes mediáticos, económicos, etc.
Y ¿qué pasa? Pues que incluso los mismos políticos te dicen que están trabajando para esas fundaciones (de multimillonarios, etc.). Y lo dicen… y se reúnen en privado… no dicen de qué han hablado con esas personas (cuando son funcionarios “públicos”), y nosotros lo vemos en plan como si fuera una película… (es increíble, es como ilegal, todo eso que hacen).
Y bueno, entonces son “neutrales”, o sea, te “leen” las encuestas… o sea, retransmiten la opinión pública para intentar tener buena imagen… son políticos guapos/as, y transmiten literalmente errores de lógica, falacias puras y duras, herramientas retóricas:
“no puedes obligar a nadie a llevar la vida que no ha deseado”,
donde vemos que están sacando, o activando, lógicamente, a ese “indignado” que todos tenemos dentro; porque tenemos heridas emocionales, injustificadamente, desde pequeñitos, heridas que no han venido con nosotros, y que no es justo que nadie las reciba (en el alma), pero ahora ya solo podemos sentirlas (aunque primero hemos de siquiera reconocer intelectualmente que existen esas heridas y que vienen de fuera (madres, padres…), no de nosotros), y no hemos de seguir haciendo más cosas de las cuales arrepentirnos después, si no queremos dañar más el alma, y dañarla más para mayor gloria de los que “gestionan el daño” – que son precisamente los mismos que les dan el guión a los políticos para que fomenten la venta de coches, y ese tipo de cosas -.
Así que, como vemos… todo es un tema de control: “control del alma”, es decir, de la vida, de los deseos… Y fijaos en cómo aparece ahí la palabra “deseo”, “deseado”… y “la vida”, y “nadie”, y “obligar”… Fijaos en cómo surge el tema del libre albedrío.
Eso forma parte de lo que Dios “hace” con nosotros, porque efectivamente Dios no obliga a nadie a llevar sus vidas de la manera que sea. Pero la chica (la que piensa en abortar) está contando con una sociedad “ciega”, de ciegos ayudando a ciegos… una sociedad que no toma nota de lo mal que sienta el pecado, es decir, “desarmonizar” el alma. ¿Por qué? Porque, porque, tal como comprobamos individual y colectivamente – y esto hay que irlo comprobando cada cual por su cuenta -, en nuestras vidas, los errores que cometemos compensan negativamente, es decir, recibiremos mensaje de la vida sobre los errores y sus causas (sobre todo sus causas emocionales), para que las eliminemos.
Esta eliminación de las causas emocionales de los errores que nos duelen (y que nos hacen provocar dolor a otros)… esta eliminación, podemos hacerla en caminos espirituales, digamos. Aunque, en realidad, este camino de la relación directa con Dios, el camino de recibir amor de Dios, el del amor divino, es el rápido y efectivo (a través de ir recibiendo amor, cosa que primero, quizá para muchas personas, será algo lento… recibiendo poco a poco el amor de parte de Dios)… Y si hablamos aquí de “rapidez y efectividad” es porque a veces hay mucho daño almacenado en el alma, y no podemos “limpiarla” fácilmente sin la ayuda de leyes de rango más alto, de las leyes que involucran la recepción del amor de Dios y que en general involucran reconocer realmente el papel de Dios como creador de nuestras almas y de las almas que hemos dañado. Dios no puede responsabilizarse de ese daño relativo al arrepentimiento, en nuestra alma, no puede responsabilizarse de ese tipo de daño causado en nuestra alma por nosotros haber dañado a otras almas… si nosotros ni siquiera queremos responsabilizarnos, incorporando en nuestra actitud a Dios y a esas almas, a ese daño, a ese error… honestamente.
Entonces, a no ser que nos metamos en cosas así, las leyes van a compensar/corregir, y van a intentar señalarnos el daño que tenemos en el alma. Y así, cada vez más, la vida, de forma individual y colectiva, se ve más “entorpecida”. Esto sucede así precisamente por la actividad de las leyes naturales, que son leyes que hizo Dios, que hizo alguien, y que hizo amorosamente, enfocadas en que el alma se tienda a curar y no vaya acumulando cada vez más y más daño.
Un ejemplo que hemos visto a veces: envejecemos. Envejecer no es un diseño natural. Dios no quiso que eso necesariamente forme parte de la vida; o sea, es “nuestra creación”. ¿Qué sentido tiene? Una vez que el alma acumula el daño y sigue protegiendo el miedo que daña el alma, entonces el cuerpo físico lo tiende a mostrar cada vez más para que nos centremos en eso, en el daño; y además, para que luego, una vez que ya envejecemos más, y como hemos protegido mucho daño… entonces, si de repente te vuelves muy “malo”, etc. (pues la protección del daño implica a menudo eso, pues no queremos sentir, y hacemos todo lo posible por “proyectar ese daño”, y podemos llevar unas vidas muy egoístas, lo cual es en el fondo mucha ira/frustración reprimida…)… si de repente te vuelves muy malo, decíamos… y al estar por diseño tan autodañados al estar “viejos”… resulta que uno mismo puede hacer menos cosas – entre ellas, menos “mal” -.
Vemos pues un ejemplo muy básico acerca de cómo funcionan las leyes para corregirnos (no “castigarnos”), y para ver cómo está amorosamente diseñado para eso, por mucho que duela. ¿Por qué duele? Porque no nos “subimos” a recibir el amor de Dios (que todavía podemos recibir en el planeta)… o no nos apuntamos a ciertos caminos que están más relacionados con el “alivio”, el alivio de los caminos del amor natural, que muy a menudo no conllevan crecimiento del alma de verdad, y que a menudo son solo una cierta seudoespiritualidad… donde te pueden dar toques por aquí, toques por allá para taparte una herida (con algo de “anestesia”)… y te pueden dar consejos que sí, que sí te pueden venir bien, para que no sigas “acumulando pecado”…
Así que ahí en esos caminos del amor natural, por supuesto, un cierto autocuidado, aunque es más lento, y los espíritus que los gestionan en general son bastante arrogantes (como nosotros, que lo somos en gran medida), y no tienen la misma sensibilidad con el libre albedrío que la que tienen los guías del amor divino, y que la que tiene por supuesto Dios, que lo creó todo (todo, menos el miedo y otros errores, y sus efectos).
Así que vemos un error de lógica transmitido en esa frase de la política, pues por el hecho de tener al niño no significa que la chica menor vaya a tener que “cambiar su vida”. Alrededor de ella podría haber una sociedad que despierte al pecado (cosa esta que, como estamos comprobando experimental y realmente, es el verdadero despertar)… o sea, una sociedad que, despertada, ayude a “tomar consciencia”, y que ayude tanto a la menor como a los padres o adultos cercanos, pues los padres son responsables – responsables en parte, igual que una parte de responsabilidad también podemos decir que la tiene la sociedad – son responsables de que los niños sigan asimilando ese error, esos errores emocionales (miedos, etc., emociones muy dañadas, digamos) que provocan que exista el deseo de matar, un deseo que de cierta manera se normaliza y “tecnifica”.
Y ¿qué vemos por otro lado?: El fomento de la venta de coches, por ejemplo; o sea, todos bien rodeados de cosas muertas, e idolatradas… que se recambian en plan automáticamente en “el sistema”… pues hay que “crecer económicamente” (para gloria de los controladores y de su elección de
patentes industriales, etc.).
(Aunque todas esas maneras industriales las estamos en parte dejando atrás, como vemos hoy… para ir hacia un control parece que más anestésico, tecnologizado… pero ahí se ve muy claro: se ve cuáles son los “valores” que vehiculan estas personas de la supuesta “élite”, aquella élite que algunos caracterizan como “neoaristocracia neutral” – tal como vimos en audios anteriores, donde así lo comentaba uno de los conferenciantes que vimos en esos audios -.
Entonces, el Estado podría proteger realmente el alma, pues en el fondo le viene bien o “nos viene bien”. Es decir, socialmente podríamos organizarnos para proteger eso, porque sabemos que a la larga – y a la “corta” también – habrá menos efectos de la ley de atracción, de la ley de causa-efecto, de la ley de compensación… para señalarnos los errores. Y por lo tanto habrá menos “mal” en la tierra. Pues el mal es eso mismo, en realidad, es decir: cuando nos pasa algo “malo” en realidad es un regalo para ver todo lo que tenemos dañado en el alma. Pero si no tuviéramos mucho daño en el alma, o si no hiciéramos mucho más daño en nuestras almas… (por ejemplo si no hemos abortado, en la vida, vamos a tener menos daño; y de esto puedo dar fe, testimonio, de que es así: mi lado derecho del cuerpo – que en mi caso seguramente es el que representa el lado “padre”, paterno -, está expresando en gran medida, todavía, el tema del “super mal padre” que fui, porque instigué un aborto).
Entonces, imaginad qué sencillo es… cuando empiezas a sentir tu propia alma… a sentir la certeza dentro de ella, esa certeza que viene, por cierto, de Dios (cosa esta que estamos comprobando; o sea, que no es un dogma… viene desde fuera de nuestras almas, y es esta “voz” de la conciencia sobre la que tanto se ha escrito… y que no es una “voz”).
Por lo tanto el Estado no está para “proteger la vida”, sino para proteger o expresar esas “adicciones al control de las masas” (que se alimentan de nuestros miedos, digamos, sumados), y al mismo tiempo para proteger o alimentar las adicciones de los desencarnados que hay detrás de los que pagan a estos Ayuso, Sánchez, etc. (políticos ahora en 2022).
O sea, está para digamos que “gestionar el caos”, y a veces para incluso crearlo, pues también “viene muy bien” fomentar o crear miedos de la nada, como ha pasado en los medios de comunicación, o como pasa en general todo el rato (ya hablamos de este punto “económico”, donde vemos que todo esto del alma es como si fuera un factor que ya se tiene en cuenta, muy clara y técnicamente, en la mal llamada “economía” – este tema de los deseos y emociones de las masas -).
Así que se trata de “pinchar” en lo que más inmediatamente te dé dinerito, y dé cosas… y que puedas controlar, pues, como ya vimos, cuando la gente somos vapuleados y tenemos el alma así como “borracha”, entonces es fácil manejar esa alma (un toque por aquí, otro por allá… como si fuera un borracho que va por la calle caminando – como vimos en esa imagen que me surgió en un audio otro día, esa imagen para sentir qué pasa con el alma -).
Así, podemos ver que los políticos no son para nada neutrales, sino agentes para empeorar lo que podemos llamar “salud social”, pues instan a razonar equivocadamente, porque no abortar no significa que la menor tenga que hacerse cargo del hijo. Podrían hacerse cargo muchos tipos de agencias, no solo el Estado.
Entonces, por eso se trata de control, de una afirmación de control, en plan: “trae para mí la vida – dice esta agente del Estado -, que nosotros controlaremos… Vosotros no hace falta que hagáis nada, ni que penséis mucho… ni nada; e incluso, con esta frase os voy a dar directamente una falacia para que alimentéis las heridas de infancia”.
Así que son cosas hechas a propósito, pues muchos saben lo que hacen, aunque otros políticos simplemente serán “peleles que repiten” (pues así pueden seguir en el cargo), y que atienden a esas órdenes de esas agencias globales “aborteras”, etc. Son pues políticos que instauran y refuerzan esta especie de orden anti-alma, de desalmamiento progresivo, un orden que ahora estaría adquiriendo una cualidad diferente con la tecnología – de esto ya hemos hablado bastante -.
Así que son errores lógicos sobre el aborto que, de alguna manera, “condenan” la civilización debido a lo que hemos dicho: el estado de negación en el que todos vivimos, de negación de las emociones “no sanadas” de la infancia (junto al daño que hemos hecho por las cosas de las que arrepentirnos al no haber sanado esas heridas iniciales), ese estado “interno”… va a hacer que veamos o que vivamos eventos de corrección, eventos quizá grandes, suministrados por ley debido a la existencia de este marco amoroso de “leyes naturales” (y cuidado, las leyes naturales, leyes de Dios, son muy globales, es decir, involucran por ejemplo también el hecho de que atraemos desencarnados; es decir, involucran también todas esas influencias de desencarnados que estábamos y estaremos atrayendo aún en cierta medida, con lo cual atraemos globalmente hacia nosotros estos eventos de “gran engaño”, con pandemias, etc., unos eventos donde vemos cómo se mete mucho miedo a las masas, miedo y más miedo… en vez de “meter mucho amor”, siendo como es sanador – el amor -…).
Así que sucede por compensación, debido al estado de negación. Estamos negando miedos, penas y vergüenzas, etc., emociones centrales, muy profundas. Y entonces esas leyes naturales, corrigiendo, van a parecer como un “mal”, un mal para todos. Va a parecer que hay “mala salud social”… ¿Por qué? Porque no “recibimos el mensaje”, interpretándolo como lo que en realidad es: es el “comportamiento” (la actividad) de las leyes, visto desde lo individual y desde lo colectivo… es la actividad de las leyes (de atracción, de causa-efecto…), y que es amoroso, pues es para que dejemos de degradar el alma, para que dejemos de hacernos ese daño que nos hacemos al proteger los miedos, y las vergüenzas, y las penas, y los enfados “infantiles”… en vez de sentir todo eso humildemente (como “niños”) – en vez de llorarlos, “temblarlos”, “patalearlos”, etc. -.
Y ¿qué pasa? Se promueven y se promoverán, y para nada “neutralmente”, se promoverán interpretaciones que descarten el tema del alma (algo que ya ha sido preparado desde hace muchos años: evolucionismo, venimos del mono, etc.), se proveerá a las masas de estas interpretaciones cómodas, acomodaticiamente… para así no recibir el mensaje a nivel del alma, porque eso permite o habilita más control (debido a nuestros miedos y por tanto la adicción global al control a la que servimos en gran medida)… aunque es un control que estará hecho, digamos, de otra manera: digamos más tecnológicamente, más “pulcramente”, con otros tipos de miedos y medios… etc. Pero poco a poco seguirá quizá durante un tiempo “lo mismo”, es decir, habrá “controladores” que es como si señorearan el “karma” (es decir, la ley de compensación), o intentaran señorearlo: intentando amoldar a la propia humanidad y al entorno en que vivimos a “leyes”, leyes que intenten suplantar cada vez más íntima y profundamente al alma humana y su relación con el entorno, para que no pueda darse ese proceso de sanación, el de realmente sanar la herida, el de realmente eliminar esta tendencia a “des-almarnos”, para pasar a poder “re-almarnos”. Entonces, para intentar eliminar esa posibilidad de re-almarnos se está como “sellando” esta “civilización”, una civilización que en cierto modo así se autocondena. Vemos que estas son tendencias globales, tecnológicamente servidas, y quizá por eso podemos esperar que sucedan catástrofes muy grandes, quizá.
Entonces, como hemos visto, por un lado se fomenta esta “enfermedad social”, o la normalización de “la herida” (visto colectivamente), y así es como “ellos” cuidan de la sociedad. Fomentan eso… esa “enfermedad social” que es curada falsamente, digamos.
Y por otro lado fomentan lo que “les interesa”: el ejemplo de la “venta de coches”. Eso interesa a partes de esas agencias y de agentes a quienes pagan cantidades descomunales de dinero, al parecer, de un dinero que irá o que iba un poco por otros circuitos (pagan eso a muchos agentes… y por eso se hablaba con razón de las sectas, que si illuminatis, etc., pues sucede).
Pero es que te lo hacen delante de la cara misma, y se reúnen sin saber lo que hablan… los agentes “públicos” – como presidentes o primeros ministros, etc. – se reúnen con gente como Soros… Bueno… uf, no tiene sentido.
Entonces, es como si se rieran de la gente, de la masa, del “animal colectivo” controlable al que “sirven” según las encuestas, y para mayor gloria de las heridas emocionales.
Y es que al parecer las instituciones aparentemente públicas, los Estados, etc., tienen un dueño privado.
Así pues, estamos muy engañados y sabemos la causa: nuestro “no despertar al pecado”.