Ayudar a los desencarnados | Parte principal de la carta de Miller (Jesús) sobre ayudar a espíritus (2005)

Índice
– Introducción y enlaces al audio y los vídeos
– El texto que propuso Jesús para hablar a los espíritus (última revisión: junio, 2022)
Algunos enlaces a cosas mencionadas en el audio
– Introducción al vídeo 1
– Índices de vídeos 2 y 3
– Enlace al original
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Introducción y enlaces al audio y los vídeos

El audio con este texto o propuesta de Jesús sobre «ayudar a los desencarnados», leído y algo comentado (en junio 2022) está disponible en estos enlaces:

en ivoox / descarga

A continuación enlazo una serie de conversaciones en vídeo – y de lectura – de esta propuesta.

En el vídeo 1 leemos, en grupo, la carta de Miller (Jesús) del 2005, sobre ayudar a espíritus * que tenemos abajo en texto.

En el vídeo 2, hecho pocos meses después, a finales del 2021, retomamos también en grupo la intención de hablar con los espíritus que están «en» nuestras heridas, pero leyendo antes la oración del amor divino para contextualizar. Ver índice de temas y tiempos del vídeo 2 abajo.

En el vídeo 3 hacemos lo mismo (ver índice abajo).

Se trata de una oración para animarnos a realizar esta comunicación, esta incorporación de los espíritus con los que muy a menudo intercambiamos energía desarmónicamente, cosa que no ayuda ni a ellos ni a nosotros (con ellos estamos muy a menudo en adicciones emocionales, igual que con las «personas físicas»).

El texto que propuso Jesús para hablar a los espíritus (última revisión, con correcciones: junio, 2022)

Poco antes de empezar, Jesús dice lo que contiene el siguiente párrafo, antes de la charla que ofrece para los espíritus que nos acompañen, que pueden estar en muy diversas condiciones. La charla en sí comienza tras el título que se puede ver poco más abajo («Mi versión modificada»). Con «versión» se refiere a que él hace una versión de un ejemplo de oración o de «carta» dada a través de Padgett por otros espíritus que se dedicaban a ayudar a espíritus «oscurecidos»:

«Lo que sigue es una transcripción a modo de ejemplo de lo que puedes decir a los espíritus que te rodean. No pretende ser una norma, sino sólo un ejemplo. Cuando estés hablando con aquellos que no puedes oír, considera que estos espíritus que te escuchan pueden no comprender ninguna referencia a la Biblia, a los mensajes de Padgett, a Jesús, ni a otros asuntos que impliquen tal conocimiento. La gran mayoría de los que abandonan la vida mortal no son cristianos ortodoxos, por lo que las palabras que se les digan deben tener en cuenta este hecho.

«Mi versión modificada»
[versión de Jesús, de un mensaje dado a través de Padgett por otro espíritu, amigo de Jesús]

Me gustaría hablar con mis amigos espíritus que están conmigo ahora. Si me permitís, me gustaría daros una charla sobre las Grandes Verdades del Universo, tal y como fueron reveladas por Dios a Jesús y a otros Espíritus Celestiales de los que podéis haber oído hablar, que viven en las esferas superiores del mundo espiritual, en las que vosotros no podéis entrar.

Tengo algunas razones por las que quiero hacer esto. Una es que estoy muy deseoso de mostraros las cosas que se me han mostrado personalmente y que me han hecho una persona más feliz. Otra es que algunos de los que estáis conmigo estáis en mucha oscuridad y dolor, y me gustaría mostraros cómo progresar desde esa condición a una de felicidad. También, algunos de los que me acompañan han pasado muchos años progresando y se han vuelto perfectos en el Amor Natural, pero todavía sienten que «falta algo» en sus vidas, y a veces todavía sienten un anhelo por algo más, y me gustaría mostrarles lo que es ese «algo más».

Como podrías o no saber, todos hemos sido creados por un Dios, el Creador Celestial, que es Padre y Madre de todos nosotros, y todos somos Sus hijos, y en ese sentido todos somos hermanos y hermanas. Dios ha revelado Sus Verdades a Sus hijos e hijas, y aquellos que conocen estas Verdades están ansiosos por acercarse a vosotros y contaros su experiencia personal y su progresión después de entrar en el mundo espiritual, y también están deseosos de contaros cómo progresaron desde las esferas inferiores hacia los Cielos Celestiales. Muchos de ellos habían estado en mucho dolor y oscuridad antes de progresar, y otros en el estado feliz de la vida de la sexta esfera, pero también han aprendido que la felicidad allí no se puede comparar con la felicidad del Reino Celestial.
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Judas: la tercera esfera | 19 de septiembre de 2001

[Para escuchar en formato audio / descarga]

Al hilo de los mensajes de Padgett -que hemos comentado y usado ya aquí un poco-, durante los cien años que han pasado desde entonces, ha habido mucha gente que los ha seguido.

Algunas de estas personas parece que han desarrollado bien sus capacidades de conexión con los planos de desencarnados, y de vez en cuando han recibido mensajes de personalidades muy cercanas a Jesús, como por ejemplo de «Judas Iscariote» (Judas de Queriote) -e incluso hasta muy cerca de nuestras fechas-.

Con este texto/audio seguimos la pequeña serie que empezamos aquí. Vemos cómo los mensajes de Judas encajan muy bien tanto con partes de lo contado por Alan John Miller/Jesús, así como con lo que se da en los mensajes de Padgett.

De hecho, Miller, aparte de recomendar, lógicamente, los mensajes de Padgett… si recuerdo bien también comentó en algún encuentro que realmente Judas y otros habían hablado a través de varias de estas personas recientemente.

Esta serie trata de forma breve sobre la sucesión de planos y sobre la progresión del alma en ellos.

Nota: Un mensaje anterior, via Padgett, y muy relevante, es este (dado en este caso por Jesús).

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La tercera esfera
19 de septiembre de 2001
Recibido por H.
Cuenca, Ecuador

Mi querido hermano, acudo a ti para reanudar mi discurso sobre la vida en las esferas del mundo de los espíritus*.

Recordarás que en la última etapa de la segunda esfera los espíritus llegan a darse cuenta de que tienen que llevar a cabo algún trabajo, siempre para ayudar a otros. A este trabajo lo llaman “tarea de expiación”, pues según su comprensión, se trata de un trabajo que tienen que realizar en parte para pagar por sus pecados, y en parte para devolver la ayuda que ellos mismos han recibido, y que de hecho siguen recibiendo.
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